Mi lista de blogs

miércoles, 29 de agosto de 2012

La nota que no quieres recibir


           Hola, ante todo quiero pedirte mis más sinceras disculpas por escribir estas líneas, pero desde el momento que entraste por esa puerta sentí la necesidad de hablarte, de acercarme a ti para expresar todo ese sentimiento que de pronto invadió mi mente y todo mi ser. Posiblemente dirás que estoy loco porque nunca me has visto… en eso tienes razón… pero hay historias que comienzan sólo con un intercambio de miradas,  así como la mía, que adquirió una sola dirección, en este caso, directamente hacia ti.

                Quien diría que hoy, cuando decidí venir a este restaurant a tomar algo para olvidar un duro día de trabajo, ibas a aparecer con esos detalles que muy pocas personas tienen. Te confieso que mi corazón palpitó rápidamente, me puse muy nervioso, mi cuerpo se paralizó casi al instante, mis ojos no encontraron otro destino que tu rostro, pensé por un instante “¿es posible que exista alguien así?” “¿es real todo lo que estoy viendo?”… definitivamente sí… eras tú.


                Mis amigos reían con la expresión que dibujaba mi cara, estaba desconectado totalmente del mundo, sólo me importaba lo que en mi habías causado al momento de verte y la necesidad casi inmediata de decirte miles y miles de cosas. Les comenté lo que sentía y allí comprendieron mi comportamiento, algunos me decían “ve y dile… habla con ella…”, otros  “no lo hagas, a lo mejor se moleste por tu imprudencia”, en fin, me encontraba en una disyuntiva; tal y como un niño de escuela en su primer encuentro con una chica.


                Pienso que tú y yo estábamos destinados a encontrarnos, a cruzarnos en el camino, a escribir una historia que espero con ansias que tenga un final feliz…  el hecho era inevitable. Cuando te levantaste (supongo para ir al tocador), me quedé atónito, me imagino que ya te habías dado cuenta que te observaba desde hace rato… por un momento pensé que me ibas a reclamar o a decirme sobre tu incomodidad pero no fue así, sólo me miraste y seguiste… esa reacción me llenó de valor y me dio fuerzas para escribir estas líneas que, aunque pueda causarte risa, viene desde lo más profundo de mi corazón, desde el alma misma.


                Sólo te voy a pedir un favor, digamos que es para que me entiendas un poco… levántate, mírate frente al espejo… observa detenidamente esa imagen…esa imagen que muy pocas personas la tienen (por algo es muy difícil ignorarte)… repasa muy sutilmente cada rasgo, cada curva, cada milímetro de piel… piensa en qué se puede diferenciar tu rostro de los demás… te doy una pista… Es sencillamente impresionante.


                ¿No te das cuenta?,  ¿Crees poder descifrar lo que veo en ti?, ¿Ahora si puedes ver lo que mis ojos notaron cuando llegaste?, ¿Puedes ver por qué me paralicé al instante?... Mejor decirlo antes de explotar, así sea víctima de un desprecio……….
                               








                                                                                       TIENES UN MOCOO!!!


Nota: Por cierto, eres bonita.-  

0 comentarios: